¿CÓMO SE DETERMINA EL CONTROL DE ESFÍNTERES?
Este trastorno se determina cuando los
niños al ingresar a jardín, a la escuela o en el hogar, no logran contener las
ganas de ir al baño o en algunas ocasiones no van al baño por temor o timidez a
pedir permiso; también puede ser por el trato que sus padres les brindan en el
hogar, ya sea porque los consienten mucho o por regaños.
Hay una serie de factores que pueden
predisponer al niño a padecer este trastorno:
· Algún problema físico: Una vejiga pequeña
o de musculatura débil. Es lo primero que habría que averiguar.
· Iniciar demasiado tarde el hábito del
control del pis: Una vez pasada la edad óptima, alrededor de los 2 años, es
más difícil.
· Circunstancias críticas emocionales
(factor psicológico): Nacimiento de un nuevo hermanito, separación de los
padres, cambio de casa o de colegio.
· Factor hereditario: Es frecuente que
alguien de la familia haya tenido el mismo problema. Si es así, es conveniente
explicárselo al niño para darle seguridad.
· Un ciclo del sueño muy profundo que le
impide recibir el aviso de "vejiga llena".
· Padecer algún otro trastorno al que la
enuresis va asociado.
Como Trabajador/a social ¿Qué haría para aconsejar a los padres?
Como Trabajador/a Social hablaría con los padres para brindar unas herramientas como por ejemplo, acompañarlos e indicarles a partir de juegos como hacer estas actividades, tener paciencia y perseverancia en estos procesos en el que niño se está acoplando, respetar los ritmos propios del desarrollo y hablarles que éstos serán sus logros.
1. Una vez que empiezas no puedes volver a atrás.
Éste es el consejo más repetido, que a fuerza de oírlo tantas veces ya
parece una verdad suprema. Sí, puedes volver atrás, señal de que te has
equivocado, sobre todo cuando la iniciativa parte de los padres y no de los
hijos.
2. Hay que esperar al verano.
El niño es quien tiene que decidir, no los padres. Sólo así podrá vivir lo
como un logro personal y sentirse realizado en el proceso. Cada niño tiene un
proceso madurativo distinto y teniendo en cuenta que nacen a lo largo de los 12
meses del año, es imposible que todos de repente aprendan a controlar
esfínteres en verano.
3. En la escuela infantil te avisan de cuando tienes que empezar.
No hay duda de la profesionalidad de las cuidadoras de los niños, pero no
se puede confiar la responsabilidad como padres respecto a una de las
decisiones más importantes de su infancia. Las maestras pueden proponer, pero
la decisión es del niño.
4. Hay que empezar por el popó / Hay que empezar por el pis.
El niño debe decidir cómo, dónde y cuándo empezar. Algunos prefieren
empezar con el popó porque es más fácil anticiparse, pero otros viven mal
desprenderse de algo que consideran parte de su cuerpo. El niño elige y se debe
respetar.
5. Hay que quitar el pañal de día / Hay que quitarlo primero por la noche
/Hay que quitarlo todo a la vez.
Cualquiera de las generalizaciones es igual de absurda, el niño manda y él
decide. Al contrario de lo que diga la vecina, la abuela o la desconocida que
se cree simpática del parque, cualquier opción es buena si funciona para el
niño.
6. Hay que premiar a los niños cuando hacen pis/popó en el sanitario para
animarles o no aprenderán nunca.
Los niños deben vivir el control de esfínteres como algo suyo, como un reto
personal, no algo motivado por recompensas externas.
7. Hay que regañar los o peor castigar los, o no aprenderán.
Hacerse pis encima de los pantalones es el control de error más evidente
que existe, anima con cariño a recoger el pis y/o quitarse la ropa y dejarla en
la lavadora. Ropa limpia y todos felices.
8. Hay que poner los a hacer pis cada veinte minutos.
Preocuparse para evitar que el niño se empape de pis, se le está
transmitiendo al niño dos cosas igual de perjudiciales: que equivocarse es algo
malo y no lo es, es fundamental para su aprendizaje y que no se confía en
ellos.
En este espacio podrás consultar sobre algunos juegos para saber cómo ayudar a los niños a controlar sus esfínteres. https://www.serpadres.es/1-2-anos/educacion-estimulacion/articulo/ayudar-a-nuestro-hijo-a-controlar-esfinteres-271464782876
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